El ave que camina antes de volar

Daba paso tras paso, paso tras paso...era inquietante cuando de repente me entraban unas enormes ganas de elevarme pero, aún no podía. 

-No, debo esperar- me decía a mi misma, una pequeña ave caminando entre las hojas amarillas en las calles de caracas.

Me entusiasmaba el hecho de que ya sabía volar y que aunque no salió de la manera que esperaba volé muy lejos en el cielo, aunque finalmente por una herida en mi ala tuve que regresar.

-¡Es tan hermoso volar!- miro mis marrones plumas y las estiro en un leve aleteo- Aunque es triste, muy triste dejar atrás a los que amo...

-Pero mira quién está aquí- dijo un hombre que se agachó para examinar al pequeño gorrión- ¿Qué piensas Gale?-

La avecilla aletea sus alas con dulzura para subirse a la mano extendida del hombre mayor.

-Oh bueno...Es que aun no puedo volar aunque no es eso lo que me preocupa...

El hombre acaricia el pico de Gale.

-Lo que me preocupa es que cuando vuele de nuevo iré sola.

Hubo un rato de silencio, en esos instantes la pequeña Gale comenzó a bailar en la mano de Alvaro aleteando sus alas de manera graciosa.

Entonces Alvaro miró a Gale con sus ojos verde agua y le dijo :

"Para llegar a la cima debes subir tú primero y después de que llegues lanzas una cuerda para subir a los demás"