sábado, 29 de agosto de 2015

Etiquetas

Espero que encuentren un poco de sabiduría en las letras que les dedico con cada post, voy a hablarles sobre las etiquetas que usamos o que nos colocan.

Tratamos de identificarnos como artistas, doctores o arquitectos, pero sinceramente, a estas alturas los que nos tropezamos con esa piedra de calificarnos como una de las herramientas que ejercemos en nuestra vida es un poco preocupante. Somos quienes somos no por nuestra profesión o por apellidos, es algo más grande y no lo digo para que el ego salte en tu cabeza y empiece a darte ideas exóticas.

¿Quién eres?

A veces me quedo un poco mareada intentando entender cómo las personas actúan según lo que creen ser, "Soy pobre, por eso pido una monedita" "Soy bruto para esto" o "No puedo ser fiel, no está en mis genes" tampoco estoy diciendo que yo no he caído alguna vez en etiquetas, más bien, muchas veces me encierro en alguna que otra etiqueta y al momento la elimino de mi mente, porque sé que para poder ser verdadera, las etiquetas deben estar lejos de mi. 

También, sé que éste post no será de agrado para ciertas personas cercanas a mi, tal vez ni siquiera lo lean, porque no estarán de acuerdo en aceptar a las personas que quieren "salir de las etiquetas" claro esta que, toda reacción dependerá de cómo llegue el mensaje, un ejemplo podría ser:
Las personas del mismo sexo que se atraen son iguales a las personas que son heteros (es una etiqueta separar a todas aquellas personas que no son iguales a la mayoría) lo único diferente, es que sus pensamientos y gustos son individuales y únicos, pero también los problemas pueden ser más grandes que otros. 

Existen etiquetas infinitas para las personas que entran en la sociedad y se dejan arrastrar por todas las instrucciones que se supone que debemos seguir, tenemos que seguir los patrones porque sino, estaríamos perdidos; Tal cual como ovejas, si, debemos actuar igual para no romper la etiqueta.
Y por esa razón muchos lideres no optan por hacer entender a las ovejas por qué hacen lo que hacen con ellas, no serviría de nada decirle a una oveja que tomamos su lana para obtener un beneficio del cuál ella no recibirá nada.

Lo que quiero explicar es que, al encerrarte en una etiqueta no puedes ver más allá, no piensas más allá de lo mucho que existe. Hay que aprender a pensar FUERA de las etiquetas para actuar FUERA de lo común.




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